sábado, 1 de septiembre de 2007

Festivales de Salzburgo

Pareciera que la ciudad se convierte o transforma o lo que sea. Todo Agosto lleno de conciertos, operas, obras, y demás. Desde lo más clásico hasta lo completamente contemporáneo, con artistas de todo el mundo que vienen sólo para estos festivales. Personalidades importantes del mundo que vienen a ver y ser parte del evento. Los hoteles llenos y pareciera que Salzburgo sonríe porque éste es uno de los eventos de los cuales la ciudad vive (económicamente hablando). Tengo dos persepciones de estos festivales:


Como turista: Vas todo saparrastroso, o masomenos, caminando y haciendo la típica "site seeing" y de repente encontrás, al lado de los teatros, una alfombra roja, si, como la de los oscars laaarga. Y al rato, un malón de gente y autos, alguna obra está por empezar; alguna obra terminó; o hay pausa de alguna de las obras. Y claro, es desfile: autos carísimos y limosinas espectaculares. Ropas de alta costura y no tanto, pero todo el mundo de GALA, vestidos y trajes increíbles, si, esa sensación de que se tiraron el ropero encima! No todas las personas son de Austria, es un ambiente bastante internacional. Y en frente de la alfombra roja un barsito re top con carpa y demás que, obviamente, vende todo 3 veces mas caro de lo normal. Y asi, como turista uno observa tooda esa ceremonia que sólo se da en esta época del año, todos los días durante toodo el día.


Como partícipe: y, tenes que ponerte de largo, que se yo! Y llegar media hora antes del concierto, obra o lo que sea que vayas a ver. Y obvio, tenes que ir a la carpa y, mínimo, tomarte un vino espmuante, solo para estar "in". En fin, luego entras al teatro, mirando a todos y compras tu programa, vuelteas y demás... si tenes ganas, como muchos: haces lobby. Pero no fue mi caso... Y luego, suena el timbre para que entres al concierto. Yo fui a un concierto pero hay operas y obras de teatro.



Los conciertos son siempre similares, musicos increíbles que lo que sea que toquen suena espectacular: un manjar para los oídos! Alto nivel. Al que le gusta la música clásica en vivo , que vaya. Y el público en general es austriaco, o se comporta como tal, así que respetan los consabidos silencios de los conciertos. Pero es chistoso ver que entre los diferentes movimientos del concierto, cuando llega ese silencio que indica que el allegro (o lo que sea) terminó, surge una catarata de toses como si todos estuvieran muriendose por toser y hubiesen estado aguantándose -a morir- durante toda la interpretación (jijii). Y llega el final y todos se paran y aplauden fuerte, a lo sumo zapatean fuerte, pero no hay gritos ni mucho aspaviento.

En conclusión un evento cultural que me pareció único, visto desde afuera y desde adentro.
Un ambiente internacional pero sigue siendo Austria. Muy lindos los festivales, algo para hacer por lo menos una vez!

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